Las apariencias no siempre engañan. Sin ánimo revisionista de frases hechas; y sin ideas fijas ni tampoco recurrentes, me largo a la cancha y pregunto: ¿acaso no son evidentes el ritmo de crecimiento y la notable transformación que vienen desplegando, a marcha constante en los últimos años, algunas de las grandes ciudades de América Latina, pese al karma del subdesarrollo que padece la región? Semejantes cambios no son más que la prueba palpable de una realidad floreciente e inusitada para estos lugares. Así lo consignan datos y cifras de organismos internacionales que hablan sin tapujos de una ola de bonanza que toca a ciertos países del sur, en especial a los que apostaron a la globalidad.
Claro que el tan mentado progreso no ha conseguido borrar todavía el contraste entre discursos crispados, protestas, inseguridad y falta de certezas; y una naturaleza rica en colores y formas que resiste y se prodiga en paisajes urbanos que es menester descubrir.
De ahí la idea de iniciar esta edición de PAULA con todo lo nuevo, lo que está de moda y agita la vida de diversos destinos hermanos, muchos de los cuales se revelan como alternativa más que válida, a las obvias y rutinarias escapadas en busca de placer de los predecibles uruguayos.
Planteada la revista a estas alturas, cual itinerario de viaje intenso, bien puede enriquecerse en segundo término con una visita a la Bread & Butter de Barcelona, espacio de moda cada vez más cotizado entre los cazadores de tendencia de todas las nacionalidades, capaces de dejar una entrada aproximada a los cien millones de euros, entre hoteles y restaurants de la Ciudad Condal. Da como para ir algún día, ¿verdad?
A corta distancia de allí, Carla Bruni instalada en su casa de París, abandona por un rato su personaje oficial como esposa del presidente Sarkozy, e invita a compartir la presentación de Comme si de rien n’était, nuevo disco que reúne canciones de su autoría. Mucho más lejos, en Tokio, Issey Miyake, alejado de su quehacer como diseñador de moda, dedica su inspiración y su energía a un proyecto pensado para incentivar el valor del arte local. En un país donde las obras extranjeras son las que más se valorizan, comenzó a funcionar 21_21 Design Sight, ámbito de intercambio que tiene al diseño como su protagonista principal.
Finalmente, la vuelta a casa se impone y descorazona de nuevo comprobar que las apariencias no engañan, y que todo está como está, en este gris Uruguay. Es momento de reflexión, que coincide con el mes en que se celebra a los niños. Nuestro aporte pasa por encarar dos temas duros de verdad, que en cierta forma se relacionan, y que es de orden conocer. Generalmente víctimas, los bajitos también pueden ser victimarios crueles y violentos, capaces de actos atroces. Por lo general, esos niños llevan a sus espaldas historias de abandono y maltrato. Lo reconfortante es saber que una infancia difícil no determina el carácter de su vida futura.
Como lo explica Boris Cyrulnik en el libro Los patitos feos, su capacidad de salir fortalecidos ante cualquier adversidad, es extraordinaria. Con ese concepto los dejo, no sin antes sugerir que nada es accesorio. Ni lo bueno, ni lo malo, ni lo frívolo, ni lo intenso. Es en el equilibrio donde radica la verdadera belleza.