E pur si muove.
Despertándose de la siesta invernal, y de otros letargos vecinos, Punta del Este se despereza, abre ventanas, se reacomoda, busca forma y colores, saluda a la vida. En otras palabras, la decoración de casas y departamentos configura el primer síntoma de ese retorno vital que permite –ya en Octubre- vaticinar cómo vendrá la temporada.
“Sin duda muchísimo mejor que varias anteriores”, vaticina Mirtha Fernández Aphesteguy, la conocida regente de marabierto, el centro de decoración que en la calle 30 casi 20, se ha convertido en epicentro del gusto estético de los veraneantes. Particularmente extranjeros, vale aclarar, al tener en cuenta alguna confesión de la misma responsable: “la casa del balneario todavía, para muchos uruguayos, sigue siendo un poco el rejunte de las cosas que ya la familia no usa en la ciudad. Pero, hay que decirlo, esto viene cambiando notoriamente en los últimos años”.
Abrir las puertas de los emprendimientos más recientes de marabierto configura una buena manera de conocer cómo viven sus vacaciones muchos visitantes y también los uruguayos que no le tienen miedo a la superación. “En líneas generales, existen dos clases de veraneantes: los vanguardistas que gustan de los toques modernos sin exagerar, y los clásicos que no aceptan las formas muy puras”, cuenta la decoradora al deslizar que “no obstante, todos gustan de los toques orientales, hindúes, chinos o japoneses, y todos también prefieren el clima de los años ´40 en muchos diseños”.
Pasar y ver, pues.